Un hombre y una mujer estuvieron casados más de cincuenta años.
Compartían y hablaban de todo, no tenían ningún tipo de secreto entre ellos, a excepción de una caja de zapatos, que la esposa tenía en su armario, aunque el esposo jamás preguntó por ella.
Un día, la esposa enfermó y el médico les dijo que sería muy difícil que se recuperara. El hombre, tratando de acomodar el armario, se topó con la caja de zapatos, la tomó en sus manos y la llevó a su esposa.
Ella al verla, le dijo:
–Creo que es hora de que sepas el secreto que he guardado durante todos estos años.
El esposo sorprendido y con curiosidad, abrió la caja y se encontró con dos muñecas tejidas
al crochet y una gran cantidad de dinero. Empezó a contarlo y vio que eran $ 95.000.
–Querida, ¿qué significa todo esto? Preguntó admirado.
La esposa le pidió que se sentará junto a ella y le dijo:
–Cuando nos casamos, mi abuela me dijo que el secreto de un buen matrimonio era no discutir nunca y me aconsejó que cada vez que me enojara contigo, guardara silencio y tejiera una muñeca de crochet.
El esposo tuvo que contenerse para no llorar de emoción, al ver que solo había dos muñecas en la caja.
–Quiere decir que en más de cincuenta años de compartir nuestro matrimonio, solo te has enojado dos veces… ¿Y el dinero, qué significa?
–¡Ah sí! −dijo la mujer. −Ese dinero es lo que gané con todas las muñecas que vendí durante todos estos años.
«Con esta historia se me ocurre una fuente de ahorro incalculable para que todos los matrimonios además de no discutir, puedan disponer del suficiente dinero para salir a cenar, ir al cine, aprovechar un fin de semana, ir de vacaciones… Desde luego es un ejemplo a imitar, si puedes y sabes hacer crochet»