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Debate sobre el Aborto

En pocos días se termina un año muy difícil para la humanidad, pero en nuestros gobernantes se han abocado a tratar la ley del aborto.

El Ministro de Salud, Gines Gonzalez, ha declarado públicamente que “No hay dos vidas” y de esta manera son miles los que opinan que recién hay vida cuando él bebe, toma contacto con el mundo, otros piensan que a partir de tal o cual semana… pero no es así por un lado tenemos el ovulo y por el otro el esperma, separados son solamente dos elementos más, pero en el preciso momento cuando estos dos se unen comienza una nueva vida.

Tal vez, cueste entender que la unión del ovulo con el esperma puedan formar una nueva vida.

Es muy sencillo, ya que es cuestión de tres…, cada uno aporta lo suyo, la mujer el ovulo, el hombre el esperma y Dios, la vida.

Donde se forma una nueva vida, indefectiblemente Dios tiene que estar presente, ya sea en el ser humano, animales, insectos, y toda la naturaleza que nos rodea, porque él es vida.

Esteban Bullrich, dijo algo muy importante: "Si me van a pedir que despenalice el aborto, me tienen que demostrar que no hay vida"

Nadie, ningún ser humano por más experto que sea en el tema podrá demostrar, ni a ningún ser en este mundo que no hay vida a partir de la concepción… ya que si no hubiera vida el embrión no podría desarrollarse, que yo sepa una semilla no puede germinar si está en un frasco, solo lo hace en un ámbito natural, la tierra, arena o agua.

Podemos ver en Génesis, un maravilloso relato sobre este tema. Entonces Dios formó al hombre del polvo de la tierra, y sopló en su nariz el aliento de vida; y fue el hombre un ser viviente. Es curioso que varios elementos químicos que son originales de la tierra estén en nuestro organismo

Tierra Calcio Fósforo  Magnesio  Sodio y Potasio Hierro  Yodo  Zinc

Hombre - Mujer Calcio  Fósforo  Magnesio  Sodio y Potasio Hierro  Yodo  Zinc

Hace tiempo en un laboratorio se desarrollaron unas semillas, idénticas a las originales no dejando detalle al azar, resultaron increíblemente exactas… no había ninguna diferencia, fueron sembradas, pero nunca germinaron. Que paso, si eran perfectas, obviaron el detalle más importante, no contenía la vida, este elemento que ningún hombre puede proporcionar, ya que solo le pertenece a Dios.

Para cerrar con el tema, mi opinión está a la vista, si hay vida no se puede asesinar. El hombre tiene sus leyes, si robas o matas las consecuencias no van a ser buenas. Lo mismo pasa con Dios, el estableció sus propias leyes (los mandamientos) en el 5° dice “No mataras”. Muchos respetamos las leyes, otros no, cada uno es libre de elegir qué clase de vida quiere tener. Una decisión errónea tal vez no nos alcance la vida para arrepentirnos.

Quiero dejarte una frase la de madre Teresa: “Si oís que alguna mujer no quiere tener a su hijo y desea abortar, intentad convencerla que lo tenga y que me traiga a ese niño, cuando dé a luz”.

El mejor pediatra

Con un bebe en sus brazos, una mujer muy asustada llegó al consultorio de su ginecólogo: -Doctor, por favor, ayúdeme, tengo un problema muy serio. Mi bebé todavía no tiene un año y ya estoy embarazada de nuevo.  No quiero tener hijos en tan poco tiempo, prefiero esperar más entre uno y otro...

El médico le preguntó: - ¿Qué quiere que yo haga? -Deseo interrumpir mi embarazo y quiero que me ayude, respondió la mujer.

El médico se quedó pensando un poco y después de algún tiempo le dijo: -Creo que tengo un método mejor para solucionar su problema y, además, es menos peligroso para usted. La mujer sonrió, un poco más tranquila, al pensar que el médico iba a ayudarla.

Pero él siguió hablando: -Mire señora, para que usted no tenga que estar cuidando a dos bebés al mismo tiempo, vamos a matar a este niño que está en sus brazos. Así usted tendrá un periodo de descanso hasta que el otro niño nazca.

Porque si vamos a matar a un niño, no hay diferencia entre matar a uno, o al otro.

Y hasta resultará más fácil matar a éste que usted tiene en sus brazos, ya que así usted no correrá ningún riesgo.

La mujer se asustó y dijo: - ¡No, doctor! ¡Qué horror! ¡Matar a un niño es un crimen!  -Yo también pienso lo mismo, señora, pero me pareció verla tan convencida de hacerlo, que por un momento pensé en ayudarla.

“El médico sonrió y después de algunas consideraciones, vio que su lección surtía efecto y que la mujer había comprendido que no hay diferencia entre asesinar un niño que ya nació y matar a uno que aunque todavía no ha nacido, está vivo en el seno materno”